Historia de Lisboa
Conoce la historia de Lisboa desde su fundación por los Fenicios hasta los días de hoy. La capital portuguesa tiene una historia de reyes, descubrimientos, tragedias y reconstrucciones.
Lisboa fue fundada por los Fenicios bajo el nombre de Ulissipo y al poco tiempo fue conquistada por griegos y cartagineses. Finalmente Lisboa pasó a ser la capital de la Lusitania romana llamándose Olisipo. A la caída de los romanos, pasó a formar parte del reino suevo de Galicia hasta el 585.
Periodo musulmán y reconquista de Lisboa
En el año 711 la historia de Lisboa sufrió un giro inesperado cuando cayó en manos de los musulmanes a la que dieron el nombre de al-Usbuma. Alfonso II el Casto la recuperó por diez años de 798 a 808. La reconquista definitiva se produjo en 1147 por Alfonso I Enríquez apoyado por la flota de la segunda cruzada.
Durante el reinado de Alfonso III se sentaron en Lisboa las bases de la expansión marítima de Portugal a lo que contribuyó fundamentalmente el desarrollo de las leyes marítimas dictadas por el rey Fernando I.
A finales del siglo XIV la oligarquía mercantil entronizó a la dinastía de los Avís y se abrió el periodo que habría de dar paso a los grandes descubrimientos del siguiente siglo.
Lisboa en el Renacimiento
A partir del siglo XV el puerto de Lisboa se convirtió en uno de los más importantes del mundo. Allí se estableció la casa Guiné y Mina que le daría una gran pujanza al centralizar en Lisboa el comercio con las costas de Cabo Verde.
La riqueza atrajo a genoveses, judíos, flamencos y mallorquines, cuyos conocimientos marítimos debieron influir en la corte de Enrique el Navegante.
En el siglo XVI la Casa de Indias enriqueció aún más la ciudad debido al comercio con Asia, África y Brasil, y se convirtió en el centro más importante de Europa en tráfico de esclavos.
En el año 1580 el Duque de Alba conquistó Portugal y el rey español Felipe II fue reconocido rey de Portugal.
La restauración de la independencia en 1640 y las grandes riquezas venidas de Brasil dieron una época de gran esplendor a Lisboa.
El gran terremoto del 1 de noviembre de 1755 destruyó Lisboa, lo que dio la oportunidad al Marqués de Pombal, con las riquezas que provenían de Minas Gerais, de reconstruir la ciudad Baixa según un plano regular con grandes avenidas de estilo clásico.
La ciudad cayó en manos de Napoleón en 1807 pero fue reconquistada por los ingleses, por el General Wellington.
En 1833 se restauró la monarquía constitucional que perduraría hasta la proclamación de la república en 1910.
Lisboa en el siglo XX
En 1932 se instaló la Dictadura de Salazar que permanecería hasta el 25 de abril de 1974, cuando un golpe de estado dirigido por el General Spinola acabó con la dictadura. A este hecho se le conoce como la "Revolución de los Claveles". Durante estos años Lisboa sufrió un gran cambio demográfico y expansivo.
Durante la Segunda Guerra Mundial Lisboa fue refugio de muchos exilados del los países ocupados por el eje en tránsito a Estados Unidos y Gran Bretaña.
En 1986 Portugal entró en la Unión Europea y doce años después, en 1998, Lisboa fue sede de la Exposición Universal, lo que cambió la fisonomía de esta bella ciudad. En el mismo año un gran incendio arrasó el Chiado.